sábado, 4 de junio de 2011




Desde el 15 de mayo se vive en Terrassa el movimiento 15-M, el movimiento de los Indignados. Algunos siempre han desconfiado de la representatividad del sistema político, otros explotaron con la reforma laboral o los recortes en servicios públicos, y unos cuantos se encuentran en paro y se sienten impotentes por no poder pagar la hipoteca. Pero a pesar de la gran variedad de motivos que los han hecho salir a la calle, todos tienen claro que sólo unidos pueden cambiar algo.